Hoy os hablaremos sobre las cajas de regalo para botellas, con las vacaciones en la retina del olvido, muchos tenemos la mirada puesta en las siguientes. Ya sea por el descanso que nos trae, ya por los regalos, o quizá porque con ella se acaba el año, Navidad sigue siendo la fiesta por excelencia. En ella salen a la luz los mejores sentimientos y propósitos, también los regalos más exquisitos.
Hoy elegimos las botellas; de vino, de licor o de cava, siempre son bien recibidas en casa. Sus embalajes, muchas veces, adelantan el secreto y nos hablan del valor del contenido, pues el modelo se suele escoger en función de ello.
La protección es casi todo
¿Qué diríamos si nos llegara una botella de vino caro en mal estado? Lo primero, “¡qué pena, que se ha desperdiciado un producto tan valioso!”; lo segundo, “¡qué falta de atención con el embalaje!”. Si elegimos, por ejemplo, un Borgoña, no vale la pena ahorrar en su envío; igualmente, si decidimos regalar un champagne de calidad. El embalaje siempre debe ir a tono con el regalo, no solo en cuanto a su diseño, sino también su calidad. Es cuestión de coherencia y de buen gusto.
En estos casos, en los que el vino o licor son costosos, aconsejamos introducir la botella en una caja de madera (la mayoría van etiquetadas con la propia marca) o de cartón decorada y proteger esta con otra de cartón; son un tipo de cajas suplementarias, que las hay de varias clases. Solo así prevendremos que la primera llegue en buen estado, ya que durante el transporte a veces surgen incidentes que provocan roces o roturas en las cajas; dicen que más vale prevenir…
El envío por Correos o agencias privadas es muy habitual en estas fechas y las cajas deben ser específicas; es decir, que lleven sujeción integrada para que las botellas vayan en la posición correcta; en este caso, no es necesario usar material de relleno.
Pero no todos van a ser vinos de rascarse el bolsillo; el Huffington post, que es líder en tendencias, nos da pistas para regalar vinos por menos de 10 euros y acertar: los manchegos y los catalanes son una buena opción. En el enlace anterior encontrareis qué tipo de vino elegir según el destinatario; muy interesante, por cierto.
Si lo que nos interesa es enviar varias botellas a la vez (dígase a familiares, grupos de amigos o varios trabajadores de la empresa…), nos convienen las cajas de cartón con capacidad para 12 botellas; su estructura facilita que cada botella vaya empaquetada por separado y envuelta en cartón, aportando estabilidad y seguridad.
Para otro tipo de bebidas, como refrescos, zumos, cerveza, etc. también existen cajas específicas adaptadas a estos tamaños más pequeños. Las hay con diferentes capacidades, pero lo habitual es que quepan hasta 24 botellas de 0,33 l y 0,5 l y hasta 270 mm de altura.
Estilo a la vez que sencillez
Si bien los envoltorios de botellas en estas fechas deben mantener un diseño elegante y moderno, también nos interesa que sean prácticos, es decir:
- Que las cajas más ligeras se vendan sin montar, para ahorrar espacio.
- Que el montaje inicial de la caja sea rápido y fácil.
- Que el contenido no sufra ningún riesgo desde que entregamos el paquete hasta que llega a su destino.
- Que los separadores sujeten bien las botellas y no sufran ningún movimiento ni roce entre ellas.
- Que las cajas contengan medidas adecuadas para botellas de formas y tamaños distintos.
- Que lleven impresos los avisos necesarios: “Arriba aquí”, “Cuidado, cristal” y “Proteger de la humedad”
- Que estén homologadas por Correos y las agencias de transporte más internacionales, como DHL y UPS. Esta homologación asegura la estabilidad probada y garantiza un transporte seguro y sin roturas.
- Finalmente, que la forma de la caja facilite el cierre rápido y sencillo.
Una vez más, no tenemos excusa para hacer ese regalo de Navidad con la mejor presentación y agradar a los demás. Nuestros diversos modelos de embalaje siempre le solucionarán el tipo de envío que necesita, combinando el diseño, la comodidad y la seguridad.
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