La eficiencia y la optimización son dos conceptos que se pueden aplicar a cualquier sector empresarial y a cualquier actividad dentro del proceso productivo. En el caso del packaging, además, no solo reporta un claro beneficio económico, sino que supone un ahorro, también, desde el punto de vista medioambiental. Pero, ¿conoces todas las formas que tienes para ahorrar embalajes e incrementar tu productividad? A lo largo de este artículo, te damos algunos consejos interesantes que puedes aplicar a la hora de embalar cualquier producto y ser más eficiente.
Claves para ahorrar en tus embalajes y ser más eficiente
A continuación, te damos algunas recomendaciones que te ayudarán a optimizar costes a la hora de empaquetar los productos que salgan de tu almacén:
1) Piensa a lo grande
Siempre sale más barato comprar embalajes en grandes cantidades que de forma progresiva. Si sueles embalar productos de manera recurrente, es preferible que realices compras al por mayor del material que elijas para envolverlos, ya que los proveedores suelen facilitar precios más asequibles cuanto más grande sean las adquisiciones.
2) Lo barato sale caro
El refranero popular nunca falla, y en este caso, es fundamental elegir un material de buena calidad para tus embalajes. De lo contrario, podría romperse en el trayecto y llegar en malas condiciones al cliente final, lo que supondría una pérdida de dinero para ti en caso de que tuvieras que repetir el envío o devolver una cantidad económica a modo de compensación. Por tanto, es preferible apostar por materiales de mejor calidad con los que se reduce, de manera muy considerable, el margen de error.
3) Planifica el envío
Antes de ponerte a embalar a lo loco, comprueba algunas cuestiones básicas que pueden condicionar el sistema de embalaje que utilices:
- ¿El producto que vas a enviar requiere algunas condiciones especiales de aislamiento térmico o refuerzo por ser material frágil?
- ¿Se trata de productos inflamables que necesitan un embalaje específico?
- ¿En qué medio de transporte se va a enviar?
Estas son algunas de las cuestiones que conviene anticipar, puesto que de la respuesta depende la elección del método y material más adecuado para enviar la mercancía.
4) Aprovecha el espacio
Si vas a enviar varios productos a un mismo cliente, y siempre que no requieran un envasado especial, embálalos juntos como si fuera una única pieza. De esta forma, ahorrarás en las cajas o en el material que utilices para empaquetar, y también facilitarás la recepción al cliente, que recibirá solamente un envío.
5) Automatiza el embalaje
Recurrir a la tecnología en el momento del empaquetado es clave para optimizar costes y tiempo de trabajo. De esta forma, se calcula exactamente qué dimensiones debe tener el embalaje, y se reduce el tiempo que cada operario tiene que destinar a envolver un producto.
En ratioform te ayudamos a elegir el material más adecuado según el tipo de embalajes que suelas hacer, garantizando la máxima calidad y cumpliendo con los estándares de sostenibilidad. Recuerda: el packaging también habla de ti. ¡Cuídalo!